11/10/08

MODELOS ECONÓMICOS INCAS


Para comprender el desarrollo de la economía en el mundo andino, es necesario estudiarlo de manera separada, es decir, por regiones (costa y sierra), ya que, hablar de modelos económicos, es adecuarnos a lo que los andinos realizaron, sin copiar algún otro tipo de modelo económico clásico, que conocemos, sino, de su propio modelo, desarrollado de acuerdo a los recursos que la naturaleza le brindaba.

MODELO ECONÓMICO SERRANO:
Las condiciones geográficas de esta zona, hicieron que los andinos adoptaran un modelo propio. John Murra, indica, que para obtener productos de diversos medio ambientes, los naturales se valían del sistema de enclave "archipiélagos verticales" Así por ejemplo, el Señorío de Canta, para atender cultivos situados a diversas alturas y microclimas distantes a un solo día de camino, idearon un trabajo comunal rotativo y de temporada. Se dirigían a la puna sobre los cuatro mil metros para sembrar y cosechar una planta llamada maca (Lepidium meyenii), o realizar la esquila de sus camélidos. En otra época del año bajaban a la región cálida, a las plantaciones de coca (Eritroxylum novogranatense, var. Trujillensis) de la variedad de hojas pequeñas que se daba en la costa y era muy estimada.


MODELO ECONÓMICO COSTEÑO:
La diferente geografía de la costa, propició un modelo económico distinto al de la sierra. Una de las mayores riquezas de los pueblos costeños era indudablemente el mar, rico en especies ictiológicas. Aquello permitió que grupos de pescadores instalados a lo largo del litoral, se dedicaran únicamente a la pesca, y a salar y secar sus productos para luego intercambiarlos. Esta práctica dio origen a la división de la población costera entre pescadores y agricultores.
La reciprocidad, como institución, tuvo mayor poder en la costa (en la sierra también se desarrolló) al emplearse tanto la redistribución como el trueque, que se basaba en equivalencias establecidas y compensaba la falta de algún tipo de producto local. Así se formó en la costa un trueque local y un intercambio a larga distancia. La especialización del trabajo obligóa en la costa al establecimiento de un truque local entre sus habitantes para obtener las susbsistencias y los objetos que cada uno no producía.